SERGIO ROMO FÉLIZ DE PORTAR LA CASACA TRICOLOR

Muestra su emoción al ser tomado en cuenta para el Clásico Mundial que se efectuará en tierra de sus padres.

CULIACÁN – ( David Venn / LasMayores.com). Sergio Romo tiene un pie en los Dodgers de Los Ángeles, luego de lanzar cada una de sus primeras nueve temporadas de Grandes Ligas en los archirrivales Gigantes de San Francisco-equipo con el que ganó tres anillos de campeón de la Serie Mundial.

Pero en estos días Romo se ha visto vistiendo con mucho orgullo el uniforme de México en la Serie del Caribe, en calidad de refuerzo para los Águilas de Mexicali procedente de los Charros de Jalisco.

Durante la temporada del 2016-17, Romo-cuya familia es precisamente de Jalisco-ha disfrutado en grande su participación en la Liga Mexicana del Pacífico.

«Con el uniforme mexicano, ha sido una gran experiencia», dijo Romo, quien en la campaña regular tuvo efectividad de 0.93 en nueve presentaciones por Charros, en las que permitió una sola carrera en 9.2 entradas y ponchó a 10 bateadores sin otorgar bases por bolas. «He podido estar con familiares que tenía tiempo sin ver y jugar ante familia que no me había visto jugar en los Estados Unidos.

«Para mí, y para mi papá en especial, ha sido algo increíble».

Romo ha visto lo más alto en el béisbol, siendo parte de los equipos campeones de los Gigantes del 2010, 2012 y 2014. En particular, el segundo título de San Francisco tuvo el sello del derecho californiano, quien fue taponero de aquella edición del 2012 y cerró de manera memorable la Serie Mundial ponchando al venezolano Miguel Cabrera.

En el 2016, hubo una lesión en el tendón flexor del codo de lanzar y una estadía en liga menor antes de un excelente final de temporada regular, en la que terminó con efectividad de 2.64 en 40 presentaciones. No obstante, Romo fue castigado con dos hits, incluyendo un jonrón, y tres carreras limpias en aquella fatídica novena entrada del Juego 4 de la Serie Divisional en la que los Cachorros reaccionaron para derrotar y eliminar a los Gigantes.

De esa manera terminó el ciclo de Romo con San Francisco. Ahora, aparentemente, el californiano vestirá el uniforme de los Dodgers.

«Aún hay equipos que creen que soy capaz de jugar (a nivel de Grandes Ligas) y aún tengo la confianza en mí mismo en poder jugar y aportar», expresó Romo. «Estoy agradecido por esas oportunidades y poder decir que aún me llaman».

Pese a que permitió un cuadrangular y dos imparables más en su única presentación de la Serie del Caribe el miércoles ante los Criollos de Caguas (Puerto Rico), los buenos números que puso en la Liga del Pacífico ayudaron a Romo a subir sus bonos ante los ojos de las gerencias de Grandes Ligas.

«Me enfoqué en mí mismo y traté de mejorar en ciertas áreas», afirmó el autor de 84 juegos salvados en las Mayores. «Por eso vine a jugar, para demostrar que estoy en salud y que estoy bien.

«Hay maneras de mejorar sin importar en cuál nivel estés, así que aquí he aprendido un par de cosas y algunos trucos que honestamente creo que me pueden ayudar a lanzar un tiempo más».

EMOCIONADO POR LANZAR EN EL CLÁSICO MUNDIAL
Aparte de los nuevos horizontes en los Dodgers, Romo no ve la hora de volver a vestir el uniforme de la selección de México en el Clásico Mundial de Béisbol-y más cuando se jugará el grupo de México, Puerto Rico, Venezuela e Italia en Jalisco mismo.

«Estoy súper emocionado», manifestó Romo, quien también lanzó por la selección mexicana en el Clásico de hace cuatro años. «Tendré la oportunidad de jugar frente a mi familia y para mí, es bien emocionante.

«Volverme a poner el uniforme significa que podré representar a mi mamá y a mi papá, mis abuelos y mis tíos, que nacieron todos en México. Tengo mucho orgullo en quién soy yo y la persona en que me he convertido. Estoy agradecido de haber tenido grandes ejemplos a seguir y todos empezaron con raíces mexicanas. Para mí es una gran experiencia».