DESDE LA BUTACA

Se apagó la “Chispa”  ¿Y Luis Alfonso?

En honor a la verdad, teníamos la idea que la salida o retiro de Carlos Gastelum con Naranjeros de Hermosillo estaba cerca, pero no imaginamos que sería de la manera que se dio y en este momento.

Una pregunta frecuente entre amigos y aficionados antes de arrancar la temporada fue: ¿Cuánto le quedara al “Chispa”? nuestra respuesta era una o dos temporadas más.

Para un veterano mantenerse de titular es una tarea bastante difícil, todas las campañas aparecen jóvenes sedientos de fama y fortuna en busca de ganarse un  puesto. Esto representa un constante reto para el pelotero entrado en años y si bien gracias a su experiencia pueden tener un voto de confianza, llegado el momento, un slump o una lesión les puede costar el lugar que han ocupado por tanto tiempo.

Para nadie es un secreto que Carlos Gastelum se ha mantenido jugando a diario por su excelente defensiva y aunque su bateo ha sido cuestionado, llego a tener varias campañas con buen porcentaje, además de distinguirse por ser un efectivo tocador de pelota y correr bien las bases; sin embargo en las más recientes temporadas se le ha complicado batear en LMP. El 2015 su porcentaje  fue de .256, el 2016 .230 y el año pasado tuvo el average más bajo en 16 años de carrera con .211.

Este 2017 arranco bien, pero luego cayó en un prolongado bache que lo llevo a consumir 33 turnos sin conectar de hit. Ante esta situación y el buen momento que vive el joven Fernando Pérez fue enviado a la banca, primero contra lanzadores derechos y luego también contra zurdos, siendo relegado a funciones defensivas en las últimas entradas.

Tuvimos oportunidad de estar cerca del dogout de Naranjeros las series contra Charros y Águilas y vimos a un Gastelum incomodó y sacado de onda por la situación atípica que estaba viviendo.

Ante este panorama, el mismo solicito su cambio y la directiva lo acepto enviándolo sin boleto de retorno a Mazatlán.

¿Salida digna o por la puerta de atrás?

En estos casos lo primero que salta a la mente, es que la directiva está siendo injusta, pero es importante conocer las intenciones del jugador. Se entiende que es difícil asimilar un cambio de rol, más cuando el pelotero siente que solo está metido en una mala racha y que es cuestión de tiempo para salir de ella, entonces, desde esta perspectiva que será mejor: ¿Cambiar de aires e ir a un equipo donde te den más juego? o ¿Aceptar la situación y acoplarse a los nuevos tiempos? Es obvio que lo que Gastelum hubiera querido es otra oportunidad con Hermosillo, pero al no poder seguir bajo sus condiciones(ser titular), lo más sano fue ir a Mazatlán, en este punto, la directiva no le puso trabas y le facilito la salida, ya que no son pocos los casos donde los jugadores inconformes son congelados.

A juicio personal, sentimos que Gastelum se precipito, ya que siendo un veterano que conoce bien el negocio debió “aguantar vara” y esperar un poco más, su sueldo no estaba comprometido y con tanto movimiento que se da en esta Liga, en cualquier momento podría regresar a su posición. En Mazatlán le darán oportunidad de ser titular, pero tendrá que despertar y batear, porque si no, corre el riesgo de repetirse la historia.

En el caso de la directiva creemos que debieron intentar retenerlo cediendo un poco a sus pretensiones o bien, pudieron prestarlo y en dado caso facilitar un posible regreso, pero el  cambio fue definitivo por la primera selección de Venados en el draft del año próximo. En fin, el Béisbol es de ciclos y hoy se cierra uno importante para este carismático pelotero que supo ganarse a la afición naranja, a la cual deleito con sus grandes jugadas por 16 temporadas.

Legado

Calladito la boca y sin hacer mucho ruido, Carlos Gastelum llevaba un ritmo muy interesante y al momento de su partida se ubica en el top-5 entre los peloteros con más hits, carreras anotadas, encuentros disputados y es sin discusión el más ganador de Guantes de Oro en la historia de Naranjeros.

Se va de Hermosillo en medio de su temporada 17 y luego de 962 juegos(5to), 885 hits(4to), 448 carreras(4to), además de 3 campeonatos y 7 guantes de oro. Se dice fácil pero en un club que ha contado entre sus filas con tanto pelotero estelar, la “Chispa” se codea entre los mejores.

¿Y Luis Alfonso?

A diferencia de Gastelum que no se hallaba calentando la banca, Luis Alfonso García ha tomado una actitud relajada y madura ante el escaso tiempo de juego que se le ha otorgado.

En varias ocasiones hemos platicado con él y asegura estar bien de salud y listo para cuando se ofrezca, pero siguen sin contemplarlo.

Tenemos la impresión de que esta situación no le sorprende, ya que desde antes de arrancar temporada se sabía que la competencia estaría muy fuerte. Como bateador designado Naranjeros tiene a José Amador quién es nada más y nada menos que el MVP. Para la primera base están Efrén Navarro, Roberto Ramos, el mismo Fernando Pérez y hasta Arturo Rodríguez. Con tanto tráfico las oportunidades son escazas.

Se comenta que existía la intensión de un homenaje con retiro involucrado, también han sonado rumores de cambio, pero la realidad solo lo saben el pelotero y la directiva.

Entendemos perfectamente que los jóvenes necesitan foguearse para ir madurando, pero nos queda la sensación de que Luis Alfonso García esta desperdiciado. Es claro que sus mejores años quedaron en el pasado, pero podría tener un rol de bateador emergente o alinear de vez en cuando contra zurdos a quienes les batea bastante bien.

En su temporada 18 y con 39 años a cuestas, a como está el entorno no hace falta ser un genio para entender que se encuentra en su último año con la franquicia donde lo ha ganado todo.

Luis Alfonso García es un histórico del club y sentimos que merece la oportunidad de despedirse jugando y tratando de escalar peldaños en departamentos tan importantes como jonrones y producidas, si responde o no, esa ya será cosa de él, pero por lo menos darle la alternativa.

Que tengan un excelente día.

Hermosillo, Sonora a 8 de noviembre del 2017.

Dr. Tomas Alonso López Ríos.

Director de www.solobeisbol.mx