“El Titan” fue dejado en libertad por los Mets y su gran carrera podría estar llegando a su fin.
La carrera de Adrián González en las Grandes Ligas ha sido exitosa, cuenta con cuatro Guantes de Oro y cinco participaciones en Juegos de Estrellas, podría estar por llegar a su fin luego de que fue dejado en libertad, de manera sorpresiva, por los Mets de Nueva York el pasado fin de semana.
El ‘Titán’ llegó a las Mayores en 2004 para jugar en la organización de los Rangers de Texas, equipo con el que solo permaneció por dos temporadas con 59 juegos disputados y logró conectar 44 hits en 192 turnos al bat, por lo que de inmediato se colocó en la vista de los Padres de San Diego, quienes lo pusieron en una mayor vitrina.
Con los fronterizos, Adrián jugó durante cinco temporadas con muy buenos números y, sobretodo, contó con todo el apoyo de la fanaticada mexicana que vio el nacimiento de una nueva figura para el béisbol nacional.
El mexicano disputó 809 juegos con los Padres, en los que conectó 161 cuadrangulares e impulsó más de 500 carreras, situación que lo llevó a sus primeros tres juegos de estrellas en 2008, 2009 y 2010.
Después de su paso exitoso por San Diego, González recayó en una de las novenas con más historia de la MLB, los Red Sox de Boston, equipo con el que solo permaneció por dos temporadas pero con grandes actuaciones, consiguiendo, incluso, su primer Guante de Oro de la Liga Americana.
En 2013 llegó al equipo en el que Fernando Valenzuela hizo historia, los Dodgers de Los Angeles, equipo con el que se consolidó como referente y que desafortunadamente una lesión en la espalda en 2017 lo dejó fuera de los diamantes por una gran parte de la temporada.
En una entrevista con The Orange County Register, Adrián señaló que incluso pasaba por su mente el retiro: «Si esto no va a mejorar y sólo va a empeorar, entonces terminaré mi contrato de la mejor manera y eso sería todo».
Para inicios de la temporada 2018, el pelotero dejó de formar parte de Dodgers y fue tomado por los Bravos de Atlanta, organización en la que solo estuvo dos días y tuvo que pasar un mes para que Mets pusiera la vista en él y lo llevara a la ‘Gran Manzana’.
Hoy su futuro es incierto, lo indiscutible es que el ‘Titán’ ha dejado huella no solo para el béisbol mexicano, sino para las Grandes Ligas por su profesionalismo dentro y fuera de los terrenos de juego.