San Juan, Puerto Rico (jueves, 18 de febrero de 2021) – La Liga de Béisbol Profesional de Puerto Rico Roberto Clemente (LBPRC), su presidente Juan A Flores Galarza, personal administrativo, Junta de Directores y franquicias se unen a la pena que embarga a la familia de quien en vida fuera el estelar lanzador puertorriqueño Juan “Terín” Pizarro.
Precisamente, la LBPRC dedicó su temporada 2020-2021 al serpentinero zurdo quien es considerado uno de los mejores peloteros nativos participantes de la campaña invernal y sus ejecutorias están plasmadas en el libro de los mejores 75 jugadores de la liga profesional de Puerto Rico.
“Juan ‘Terín’ Pizarro nos deja un legado dentro y fuera del terreno inigualable. En mi carácter personal, lamento muchísimo la pérdida de un pilar del deporte que tanto amamos. Como presidente de la liga invernal, propondré a nuestra Junta de Directores nombrar el premio al Lanzador del Año de nuestro torneo con su nombre para así inmortalizar su legado.”, expresó Flores Galarza al recibir la noticia del fallecimiento.
Pizarro nació un 7 de febrero de 1937 en Santurce, Puerto Rico y tuvo una trayectoria histórica siendo el serpentinero con más lideratos y galardones obtenidos en las 22 temporadas que participó en nuestra liga invernal. Precisamente, el uniforme de los Cangrejeros de Santurce fue el que más veces vistió en su caminar beisbolístico desde 1955 y el de los Criollos de Caguas en los torneos 1956-57, 1957-58 y 1958-59. Entre los premios que obtuvo se destacan: Jugador Más Valioso, ganador de la Triple Corona para lanzadores con una efectividad de 1.32 sin permitir carreras en 33 entradas consecutivas (1957-58).
“Juan Pizarro es el mejor lanzador boricua de todos los tiempos y uno de los mejores entre los latinos. Poseedor de múltiples récords, siempre jugó nuestra liga, aún en sus mejores momentos en las Grandes Ligas. Es una pérdida bien grande para Puerto Rico. ¡Que descanse en paz!”, mencionó Jorge Colón-Delgado, historiador de la LBPRC.
De por vida, Pizarro ostenta las marcas de ponches (1,804), blanqueadas (46) y efectividad con al menos 1,000 entradas (2.51); segundo en victorias (157) y entradas lanzadas (2,403). Estos récords perdurarán por siempre al igual que su legado para esta y futuras generaciones.