DESDE LA BUTACA

“Balance Naranja”

Sin lugar a dudas la versión 2020-21 de Naranjeros de Hermosillo dejó una muy grata impresión, ya que luego de años sin lograr trascender, se regresó a los primeros planos y aunque no consiguieron el título, lucharon hasta el final y estuvieron muy cerca de coronarse.

Para Naranjeros era imperativo tener una buena actuación, en los últimos años los malos resultados han marcado a la franquicia, tanto así que se perdió el protagonismo que los ha caracterizado a lo largo de su historia.

Cuerpo Técnico

La renovación del cuerpo técnico fue un éxito, la llegada de Juan Navarrete, Juan Francisco Rodríguez y Alfredo Amezaga le dieron otra cara al conjunto, estos señores hicieron explotar al máximo la capacidad de sus dirigidos, dándole prioridad al juego agresivo donde la velocidad y la buena defensa se presenta como su mejor arma. Otro punto importante es la confianza otorgada a elementos jóvenes. Bajo el mando de Navarrete se logró algo que no habían podido sus antecesores: consistencia, sus Naranjeros jugaron bien la primera vuelta y mejor la segunda.

Al momento no se ha confirmado la continuidad de Navarrete y su gente, luego de la derrota en la final el consenso general fue que se perdió por culpa de Él al dejar escapar juegos claves, sin embargo esta apreciación es muy dura, no hay que olvidar que si se llegó tan lejos fue en gran medida por la buena dirección que hubo y que estos señores a pesar de todos los inconvenientes estuvieron muy cerca de lograr el título. Pareciera que con este grupo se inicia un proceso importante que podría dar muy buenos resultados en el corto plazo…estaremos pendientes.

Los Imponderables

De una u otra manera todos los equipos sufrieron los estragos de la epidemia de Covid-19. Para Naranjeros lamentablemente no solo los ataco durante el rol regular, sino que en plena postemporada varios de sus elementos quedaron fuera desde la primera serie, luego en semifinales y Final. Pese a esto los jugadores que estaban disponibles se fajaron y cumplieron con una notable actuación. Pare el anecdotario quedara la baja del refuerzo Rodolfo Amador, lo cual fue un duro golpe y a lo cual hubo que sobreponerse.

Postemporada

En la misma primera etapa de playoffs Naranjeros tuvo oportunidad de cobrar venganza de Venados de Mazatlán, con un equipo menos potente al del año anterior donde se contaba con 4 extranjeros en el line up(Santos, Hernández, Peguero y Rodríguez) además de Roberto Ramos y en la banca elementos como Fernando Pérez y no pudieron ante la tropa de JJ Pacho quién le comió el mandado a Vinny Castilla; sin embargo en esta ocasión encabezados por un grupo de jóvenes y solo un extranjero en el orden al bat(Hernández) cobraron la afrenta en 6 emocionantes juegos.

Luego vendría la semifinal contra Sultanes donde ya se tuvieron ausencias notables de varios jugadores que dieron positivo a Covid. Con todo y esto el grupo saco la casta y lograron acceder a la Gran Final al dejar fuera a los Regios en 6 encuentros.

El escenario quedo listo para una edición más del Clásico de LMP al enfrentar a Tomateros de Culiacán y vaya que nos entregaron una serie emocionante de principio a fin. Con Naranjeros en ventaja 3-1 todo parecía indicar que los sonorenses se ceñirían la corona pero no contaban con la astucia de la “Maquina Guinda” la cual carburo de manera perfecta en los últimos desafíos para de esta manera consumar el regreso y lograr el bicampeonato. Sin dudas duro golpe para todos los seguidores naranjas que se quedaron suspirando por el anhelado campeonato que se niega desde el 2014.

El Quinto Juego

El quinto juego de la final será recordado como el inicio del regreso Guinda para levantarse del 1-3 en contra. En ese encuentro Naranjeros se enfilaba a otro cerrada victoria la cual le daría el cetro, sin embargo las últimas entradas se vio un manejo diferente a como lo venían haciendo generando todo tipo de comentarios. Hoy sabemos que ese día varios lanzadores estaban indispuestos por lo que el abridor Ryan Verdugo salió a lanzar la séptima entrada y luego cuando se esperaba toda la caballería en las figuras de Robinson Leyer y Fernando Salas vinieron Marcelo Martínez, Alán Rangel y Wilmer Ríos quienes eran los únicos brazos disponibles. Además de Leyer y Salas, tampoco podían lanzar Ozzie Mendez, Heriberto Ruelas y Rafael Martin. Aunque todavía Naranjeros tuvo la doble oportunidad de finiquitar la Final en casa, el destino se escribió en ese quinto juego donde no se pudo mantener la ventaja y lo demás es historia.

Lo que viene

Para Naranjeros la ausencia de bateo de poder fue notable toda la temporada, en playoffs la falta del batazo largo recrudeció, siendo el soporte del refuerzo Isaac Paredes muy importante, de tal manera que una de las prioridades para la próxima campaña debería ser buscar uno o dos bateadores de poder que le dan ese plus al line up. Si elementos como Roberto Ramos, Alejandro Kirk o Luis González no van a reportar no hay que esperar hasta diciembre para sustituirlos, sino prepararse con tiempo y no andar a lo último en las carreras.

Se viene una temporada muerta muy viva para la directiva naranja, estuvieron tan cerca de salir campeones y ahora habrá que analizar a conciencia la estrategia a seguir. Entre las preguntas que nos saltan a la mente están: ¿seguirá Navarrete al frente?, ¿Quiénes son material de cambio?, ¿Cuál será el futuro de varios veteranos?, ¿Consumaran cambios bomba? En fin, solo el tiempo lo dirá.

Que tengan un excelente día.

Hermosillo, Sonora a 2 de marzo del 2021

Dr. Tomas Alonso López Ríos

Director de Solo Béisbol México