RINCÓN BEISBOLERO
Por: José Carlos Campos
LOGRO– No hace mucho, un pelotero aún en activo nos comentaba fuera de libreta su crítica a la directiva de Sultanes de Monterey por no retener a Edgar Quintero, quien le había dado buenos momentos al equipo, prácticamente lo mejor de su carrera, dejándolo ir sin más ni más.
Cambiado este año a los Saraperos de Saltillo, Qujntero recién celebró su ingreso a los 1500 hits de por vida en la LMB, cifra que no deja de llamar la atención y que de alguna manera se tiene que reconocer. Conectarlos es tarea ardua y que requiere talento, sea donde sea.
Ciertamente no es cosa menor, con todo y calendarios de más de 100 juegos, la reconocida debilidad del pitcheo y el hecho de que peloteros de más de 40 años se puedan sostener aún vigentes gracias en mucho al factor anterior. Mantenerse sano contribuye en gran manera para que eso sea posible.
La euforia queda para círculos pequeños porque la cima está muy alta. El club que encabeza Jesús Sommers (con los 3004 imparables de por vida) hacen que llegar a la mitad de la cifra se vea como un asunto meramente citable y no recordable. El grupo de quienes han llegado a los 1500 puede ser de pocos, de acuerdo, pero no tan selecto como el de los 2 Mil, en donde se pueden encontrar varios nombres célebres.
Con 38 años a cuestas, difícil que Quintero arribe a una cifra donde apenas quienes sacaron provecho de calendarios más extensos.
Quintero por cierto es de la clase jugadores que en verano tiene mucho qué contar y en invierno carrera que no deja nada para evocar.
MILANESA– Y tras el logro de Quintero, Ivan Terrazas se dejó sentir conectando su hit Mil, hito menos trascendente si es que nos atenemos a la lógica anterior. Podría ser que manteniéndose en forma y saludable, puede llegar en cinco o seis años a los 1500, si es que tomamos como referencia que anda ya en los 32 años de edad.
Aquí el tema es que con temporadas como las actuales, de mal pitcheo y mucho bateo, hay peloteros a quienes bastará mantenerse sanos para ir sumando hitos que se les reconocerá como “hazaña” siendo que lo natural es que de 40 a 50 jugadores por temporada apilen 100 o más hits. Bajo ese punto de vista, vale le pena subir la vara para señalar eso de los “clubes selectos”.
Que si surge un talento de quien pudiera pensarse que pudiera ir más allá imaginarlo con los 1500 hits, la idea se queda corta porque es cuestión que surja para que lo quieran vender. Pelotero en edad temprana que despunta es acariciado como oro molido, así no sea real material de Grandes Ligas.
La venta es primero.
ACIAGO– Era cuestión que se aventara uno para que otro lo siguiera, o es eso o al menos así lo aparentaron. Fueron los Olmecas de Tabasco quienes se lanzaron al ruedo cesando a Paquín Estrada y enseguida llegaron los Guerreros de Oaxaca quienes hicieron lo mismo con Enrique “Che” Reyes.
La historia de siempre y que al menos en este caso, no va a torcer el rumbo.
Dos directivas que entregaron a sus manejadores sendos rosters que no dan para mucho, con muchas dudas en sus diferentes departamentos y que a lo menos que exigían a Estrada y al Che eran a algo parecido a un milagro. Ni modo de correr a los gerentes deportivos o a los dueños (Un gobierno estatal y Alfredo Harp).
Los dineros de los tabasqueños usándose en cosas veredes mientras que para colmo del cuadro oaxaqueño, los Diablos tampoco andan bien así que ni cascajo les cae del hermano mayor. Detalles que de cualquier forma entran en la tradición de que siempre será más fácil despedir a uno que a 25.
O ya en calor presente, creer que la paciencia no paga.