Por Andrew Simon
No es necesario ser un hijo de un jugador de Grandes Ligas para llegar a ese nivel, pero no cabe duda de que es una ventaja.
Sea que hayan crecido en un clubhouse de la Gran Carpa, contaron con los consejos de su padre o simplemente heredaron buenos genes, no es algo raro ver nombres conocidos de una generación anterior resurgir en Las Mayores.
El mejor ejemplo de lo anterior se ha convertido en una gran historia incluso antes de su debut con un equipo grande. Estamos hablando del dominicano Vladimir Guerrero Jr. — quien es calificado por MLB Pipeline como el prospecto número 1 y posiblemente el mejor prospecto ofensivo en años recientes. El miércoles, el dirigente puertorriqueño del conjunto de Toronto, Charlie Montoyo, anunció que Guerrero Jr. subirá al equipo grande el viernes para el inicio de la serie contra los Atléticos.
De cualquier manera, sería mucho anticipar que este adolescente supere a su padre. Vladimir Guerrero fue elegido al Salón de la Fama en el 2018 (su segundo año en la boleta), coronando una carrera que incluyó nueve Juego de Estrellas, ocho Bates de Plata y el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Americana en el 2004. En 16 campañas con los Expos, Angelinos, Rangers y Orioles, el quisqueyano entusiasmó a los aficionados con su estilo de darle a cualquier pitcheo y un fuerte brazo, terminando con promedio de .318 con 449 cuadrangulares y OPS+ de 140.
Cuando Vladimir Jr. debute con los Azulejos, el joven toletero se unirá a otros jugadores de segunda generación, como Cam Bedrosian (hijo de Steve), Delino DeShields Jr., Dee Gordon (hijo de Tom), Dereck Rodríguez (hijo de Iván), y Travis Shaw (hijo de Jeff). Además, otros están en camino, incluyendo el también dominicano Fernando Tatis Jr. (el prospecto número 2, según MLB Pipeline) y Bo Bichette (hijo de Dante y el prospecto número 11).
Pero cada uno de dichos jóvenes tendrá trabajo por hacer para calificar en la lista de los mejores dúos de padre e hijo en la historia de las Grandes Ligas.
La lista se basó en la estadística WAR — en paréntesis — de Baseball-Reference.com, dándole preferencia a los pares que tuvieron más éxito.
1. Bobby Bonds (57.9) y Barry Bonds (162.8)
No hay otro jugador de posición en la historia de Grandes Ligas con un mejor WAR que Barry, quien tiene siete premios al Jugador Más Valioso, es el dueño del récord de jonrones en una temporada y de por vida y prácticamente cambió el béisbol a comienzos de los años 2000. Solamente las sospechas de dopaje han impedido que sea inmortalizado en el Salón de la Fama. Y mientras que Barry opaca a su padre, Bobby no debe subestimarse. Los Bonds son los únicos dos jugadores en la historia en pegar al menos 300 jonrones y robarse al menos 400 bases, también son los únicos en llegar a 20 bambinazos y 20 estafadas en 10 temporadas diferentes.
2. Ken Griffey (34.5) y Ken Griffey Jr. (83.8)
Estas figuras lograron jugar juntos con los Marineros en 1990 y 1991, famosamente volándose la cerca de manera consecutiva contra los Angelinos el 14 de septiembre de 1990. En ese momento, Griffey padre estaba al final de una carrera de 19 años que incluyó tres convocatorias al Juego de Estrellas y par de anillos de Serie Mundial con los Rojos. Aunque su desempeño fue más consistente que espectacular — OPS+ entre 96 y 129 en 14 campañas — su hijo se convirtió en una mega estrella. Con 630 bambinazos y 10 Guantes de Oro, Griffey Jr. entró fácilmente al Salón de la Fama en el 2016 (su primer año en la boleta).
3. Felipe Alou (42.2) y Moisés Alou (39.9)
Estos dos ni siquiera son toda la familia beisbolera dominicana. Los hermanos de Felipe, Jesús y Mateo, jugaron cada uno 15 temporadas en las Grandes Ligas, con el último también consiguiendo WAR de más de 20. Su primo José Sosa, lanzó brevemente en la Gran Carpa y su sobrino Mel Rojas fue serpentinero por 10 campañas y consiguió 126 rescates. Pero apenas entre Felipe y Moisés tuvieron 34 años de experiencia en las Mayores y pegaron más de 4,200 imparables, 500 cuadrangulares y 750 dobles. Y eso no incluye los 14 años de Felipe como dirigente de los Expos y Gigantes.
4. José Cruz (54.4) y José Cruz Jr. (19.5)
Como Felipe Alou, el puertorriqueño José Cruz fue uno de un trío de hermanos en Las Mayores, con Héctor jugando nueve temporadas y Tommy viendo acción por varios juegos. José jugó 19 campañas, incluyendo 13 con los Astros y está entre los líderes de la franquicia en varias categorías ofensivas, incluyendo tercero en WAR, hits y estafadas, también ocupando el primer lugar en triples. Su hijo fue elegido de tercero en el draft amateur de 1995 y tuvo una sólida carrera de 12 años, incluyendo una campaña de 30-30 con Toronto en el 2001.
5. Sandy Alomar (10.5) y Roberto Alomar (67.1)
Sandy, principalmente como intermedista, generó la mayoría de su valor con el guante y la agilidad en las bases durante 15 temporadas, con 227 estafadas. Pero también tuvo dos hijos que contaron con carreras más exitosas, con Sandy Jr. ganando el Novato del Año y consiguiendo seis convocatorias al Juego de Estrellas como receptor. Roberto resultó teniendo una carrera que lo envió al Salón de la Fama. Este último también participó en 12 Clásicos de Verano seguidos de 1990 al 2001, ganando 10 Guantes de Oro y dos títulos de Serie Mundial con los Azulejos de 1992 y 1993.
6. Cecil Fielder (17.2) y Prince Fielder (23.6)
Padre e hijo fueron acuerpados cañoneros. Ambos, de manera increíble, terminaron con exactamente 319 vuelacercas en su carrera. Cecil fue segundo en las votaciones al Jugador Más Valioso de la Liga Americana con los Tigres en 1990 y 1991, cuando sacudió un total de 95 bambinazos y remolcó 265 carreras. Prince conectó 50 cuadrangulares en el 2007 y fue un bateador más exitoso que su padre, con OPS+ de 134 en su carrera. Desafortunadamente, una lesión en el cuello lo obligó a retirarse antes de tiempo en el 2016 a los 32 años de edad.
Otros dúos destacados:
• Randy Hundley y Todd Hundley
• Los dominicanos Julián Javier y Stan Javier
• Dave LaRoche y Adam LaRoche
• Vern Law y Vance Law
• Gary Matthews y Gary Matthews Jr.
• Hal McRae y Brian McRae