GIOVANNY GALLEGOS, SE DICE LISTO PARA RECUPERAR SU NIVEL

John Denton/MLB.com

JÚPITER, Florida – La campaña pasada, cuando el relevista de los Cardenales, Giovanny Gallegos, estaba batallando atípicamente, su manguito rotador derecho le estaba molestando y no sabía qué hacer. Entonces, el mexicano acudió a un excompañero y buen amigo.

El exreceptor Yadier Molina se retiró en el 2022 tras 19 años detrás del plato por los Cardenales y se encontraba en algún lugar de Puerto Rico cuando Gallegos le llamó para pedirle consejos. Durante años, Gallegos contó con la guía de Molina mientras estaba en el montículo para mantenerlo con el enfoque correcto, aun cuando la reacción del careta no era la más amigable que digamos. No sólo Gallegos nunca rechazó una sola seña del nueve veces ganador del Guante de Oro, sino que raramente rompía contacto visual cuando Molina le reprimía airadamente.

Después de que Gallegos le había contado a su amigo todos sus problemas, Molina acudió a su vasto banco de datos que tiene en su mente beisbolera y recordó un momento positivo para el relevista. Molina hizo que Gallegos reviviera una actuación a finales del 2021, cuando los Cardenales recibían a los Padres. Esa noche de septiembre, Gallegos salió desde el bullpen y dominó a los Padres de manera impresionante para cerrar el juego con algunas de sus rectas y sliders más venenosos.

“A veces le llamo a Yadi y el año pasado le dije, ‘Bro, necesito tu ayuda, porque no sé qué está pasando conmigo’. Me sentía terrible y hablar con él me devolvía la confianza”, recordó Gallegos. “[Molina] me recordó aquella noche cuando [Adam Wainwright] lanzó un gran juego y luego yo ponché al último bateador. Después de ese último pitcheo, Yadi gritó, ‘¡Oye, [improperio], así es como se lanza! ¡Lo hiciste bien!’.

“Yadi es mi muchacho y un buen amigo. Siempre me da confianza, porque hemos estado juntos en tantas situaciones diferentes”.

Gallegos, de 32 años, se encontraba en una situación bien diferente cuando finalizó la temporada del 2023 en la lista de lesionados con tendinitis en el manguito rotador derecho. Hasta ese momento, Gallegos había sido uno de los lanzadores más durables del béisbol, hasta el punto de encabezar la Liga Nacional en presentaciones (268) y entradas lanzadas como relevista (283.1) desde el 2019, según una investigación de MLB. El mexicano lideró a los Cardenales en presentaciones en el 2021 (73) y el 2022 (57), antes de caer al tercer puesto la temporada pasada (56).

“Su buena disposición para tomar la bola cada noche es una de esas cosas que valoras”, dijo el coach del bullpen de los Cardenales, el panameño Julio César Rangel. “Es parte de su naturaleza, porque tiene un arduo deseo de ganar. Aun en los días cuando estaba un poco cansado – y eso es parte de ser un lanzador en una temporada bien larga — Gio se prepara a diario para lanzar cuando se le necesite”.

Todo ese trabajo podría haberle pasado factura a Gallegos en el 2023, cuando vio su efectividad (4.42) y tasa de batazos duros en contra (46.2%) elevarse dramáticamente, según Baseball Savant. Su eficaz slider todavía le permitió ranquear en el mejor 2% de MLB en tasa de swings a pitcheos fuera de la zona de strike (35.1%) y en el mejor 3% en tasa de envíos abanicados (36.2%), pero fue menos efectivo ante bateadores derechos que contra zurdos. Seis de los 11 jonrones que permitió en el 2023 fueron frente a sliders. Incluso su recta – pitcheo contra el cual la oposición tuvo promedio de .208 en el 2022 – fue castigada bajo un promedio de .267 y cuatro vuelacercas en el 2023, según Savant.

Las cosas empeoraron para Gallegos cuando fue enviado a la lista de lesionados el 18 de septiembre y donde terminaría la temporada. Era la primera vez que estaba fuera de acción y lesionado desde el 2020, y la impotencia causó una gran frustración en él.

“Fue una mala experiencia para mí, haber terminado la temporada en la lista de lesionados”, reconoció Gallegos, cuyos 76 holds (ventajas preservadas) ocupan el tercer puesto en la Liga Nacional desde el 2019 y sus 43 salvamentos están dentro del 16to puesto en ese mismo período. “El año pasado, hubo mucha frustración entre los muchachos y los resultados no fueron buenos. He estado trabajando en mi cuerpo y en mi material para estar listo”.

Gallegos, quien tiene una opción del club en su contrato para el 2025, no sólo se reportó temprano a los entrenamientos primaverales, sino que también bajó un poco de peso, producto de un trabajo de acondicionamiento durante el invierno en su natal Ciudad Obregón. Pronto, Molina regresará con los Cardenales como asesor especial del presidente de operaciones de béisbol John Mozeliak, quien dijo que Molina se presentará en la “tercera semana de marzo” como se planeó originalmente. Gallegos se dijo emocionado de volver a estar junto a su gran amigo, y emocionado por todo lo que Molina puede aportar para los Cardenales.

“Yadi nos ayudará, porque tiene tanta experiencia con toda clase de pitchers diferentes”, destacó Gallegos. “Siempre me motiva; por eso será grandioso tenerlo de regreso”.