
Vaya escándalo que se ha suscitado tras el cambio que llevo a Rafael Devers de Boston a San Francisco. Pero vámonos por partes como dijera el tremendo Jack…
Cuando los Medias Rojas externaron interés en el agente libre Alex Bregman, de inmediato Devers “respingo” al no guardar prudencia ante las evidentes intenciones de sustituirlo con el estelar antesalista que brillo con Houston.
Al cristalizarse la contratación la noticia cayó como “un balde de agua fría” para el dominicano quien sin tapujo alguno grito a los cuatro vientos que él era tercera base y que no estaba dispuesto a cambiar de posición. Los comentarios fluyeron de uno y otro lado generando un intenso debate el cual despertó la polémica en el ambiente beisbolero no solo de la “Nación Redsox” sino en toda MLB.
Aunque debemos de reconocer que Devers tiene todo el derecho a inconformarse, no queda duda de su falta de disposición, él argumenta que cuando firmo su extensión de contrato le aseguraron que serie el tercera base de Boston por los próximos diez años, sin embargo el ajuste estaba más que justificado ya que desde el 2018 al 2024 temporada tras temporada ha sido líder en errores en la esquina caliente acumulando 148 pecados en 951 encuentros para un pésimo .942 de porcentaje de fildeo. Ante este panorama la directiva bostoniana opto por firmar a Bregman ganador de “Guante de Oro” y reconocido por sus habilidades defensivas. Con una fuerte dosis de morbo se vino el inicio de campaña con Devers en plan de “Diva” y en funciones de bateador designado.
Enberrinchado tuvo un lamentable arranque ya que en los primeros 5 juegos acumulo 23 turnos sin conectar de hit y a cambio se poncho ¡15! Veces. Este ridículo espectáculo le “pico” el orgullo y empezó a mejorar con el tolete y por algún momento parecía que estaba aceptando su nuevo rol, pero cuando se lesiono el primera base Triston Casas y le pidieron que lo cubriera se negó rotundamente reavivando nuevamente la controversia.
Semanas después específicamente el 23 de mayo Bregman se lesiono(continua inactivo) y Devers pensó que no les quedaría más remedio que utilizarlo, sin embargo no lo contemplaron ni para un solo juego y nuevamente su disgusto fue evidente. Se sabe que la relación con el manager Alex Cora nunca fue buena y tras esto la comunicación se rompió. En más de una ocasión el jugador comento que se sentía infravalorado, que no lo respetaban y que lo mejor sería que lo cambiaran. Con el paso de los días la situación se volvió insostenible pero cambiar a un jugador con estos antecedentes y con 270MDD pendientes de su contrato no es nada fácil. La directiva harta de su actitud no paro hasta encontrarle un nuevo destino y fue lo más lejos que pudieron, hasta la otra costa del país en San Francisco.
Sin lugar a dudas un bateador como Devers se va a extrañar, pero un jugador con esa mentalidad egocéntrica y falta de compromiso para con lo que es mejor para su equipo, lo más sano es hacerlo a un lado y evitar todo lo negativo que puede generar en el Club House. Ahora los Gigantes tendrán que lidiar con esta “Papa Caliente”.
Tras este lamentable episodio recordamos la ocasión cuando los Bravos de Atlanta contrataron a Vinny Castilla, movimiento que repercutió en que su súper estrella Chipper Jones indiscutible titular en la antesala por varios años, fuera reubicado. A gran diferencia del espectáculo que vimos con Devers, Jones con total humildad y disposición acepto el cambio declarando su reconocimiento a la defensiva del mexicano y que no tendría problema en ceder su lugar.
De esta manera el 2002 emigro a la pradera izquierda cortando una racha de 6 viajes consecutivos al “Juego de Estrellas” como tercera base. Castilla no quedo mal al ser líder en porcentaje de fildeo con .982 al cometer solo 6 pifías en 347 oportunidades, mientras que Jones el año anterior cometió 18 en 326 chances para un .949.
El mexicano se mantuvo 2 temporadas y para el 2004 Chipper regreso a la antesala donde se mantuvo hasta el final de su carrera el 2012 la cual fue coronada con la incursión al “Salón de la Fama” el 2018. La humildad y madurez de Chipper Jones es recordada hoy en día como un acto de disciplina y entrega a su equipo, pero hay algo más aun, luego de firmar un contrato millonario ya entrado en años(2010) y ante la baja de rendimiento las siguientes temporadas renuncio al último año de su contrato por 14MD retirándose el concluir la campaña del 2012. ¡Ufff! estos actos de honestidad pocas veces se ven en un mundo donde algunos beisbolistas luego de firmar contratos millonarios se “tiran a la hamaca” y poco les importa lo mucho que le cuestan a sus equipos y el poco aporte que tienen a la causa…Sin tirar piedras dijeran algunos…
Nuestros respetos para Chipper Jones y una trompetilla para Rafeal Devers ppttrrrr…
Que tengan un excelente día.
Hermosillo, Sonora a 21 de junio del 2025.
Dr. Tomas Alonso López Ríos
Director de Solo Béisbol México