
NUEVA YORK — El primer paso está completo. Para cumplir su misión de defender su banderín de la Liga Americana y regresar a la Serie Mundial, los Yankees primero necesitaban despachar a sus rivales más históricos. Y ahora lo han hecho, asegurando una victoria de 4-0 sobre los Medias Rojas en el Juego 3 de la Serie del Comodín de la Liga Americana el jueves en el Yankee Stadium.
La temporada de Boston ha terminado, mientras que los Yankees descorcharán botellas y celebrarán en su clubhouse, pero no por mucho tiempo. Tienen millas que cubrir, listos para avanzar y enfrentarse a otro rival divisional, los Azulejos, en la Serie Divisional de la Liga Americana que comenzará el sábado en el Rogers Centre.
En el 47ta aniversario del icónico jonrón de Bucky Dent que selló también un título divisional, Cam Schlittler superó a Connelly Early en un duelo de novatos. El lanzallamas Schlittler rompió las cien millas con su recta y usó sus lanzamientos secundarios de manera efectiva, ponchando a 12, un récord de la franquicia para un novato en su debut en postemporada.
Los Yankees se aprovecharon de los errores defensivos de Boston en el cuarto episodio. Cody Bellinger abrió el inning con un doble fruto de la intensidad tras dar un elevado de rutina que chocó con el guante del jardinero central Ceddanne Rafaela.
Eso desató una secuencia en la que seis de siete Yankees se embasaron ante Early, incluidos sencillos productores del dominicano Amed Rosario y Anthony Volpe. Austin Wells conectó un rodado que rozó el guante del inicialista Nathaniel Lowe, permitiendo que dos carreras más anotaran.
Schlittler, el lanzallamas de 24 años de Walpole, Massachusetts, logró mantener la ventaja. El derecho no hizo su debut en Grandes Ligas sino hasta principios de julio, pero parecía hecho para el escenario de octubre, luciendo imponente en ocho entradas en blanco.
La historia pesó mucho en la serie, especialmente después de que los Yankees perdieran el Juego 1. Se convirtieron apenas en el tercer equipo en ganar una Serie del Comodín después de perder el Juego 1, uniéndose a los Atléticos de 2020 (contra los Medias Blancas) y los Padres de 2020 (contra los Cardenales).
Esta fue la primera vez desde el jonrón de Aaron Boone para ganar la SCLA del 2003 que los Yankees ponen fin a una temporada de Boston, rompiendo una racha de tres enfrentamientos consecutivos de playoffs ganados por los Medias Rojas sobre Nueva York: la SCLA del 2004, la SDLA del 2018 y el Juego del Comodín del 2021.
CACHORROS DEJAN EN ELCAMINO A LOS PADRES
CHICAGO — En cuanto la pelota tocó el cuero del guante de Pete Crow-Armstrong, el jardinero central de los Cachorros giró de inmediato para mirar a los aficionados que enloquecían en las gradas. Hizo un gesto de victoria con el puño izquierdo una vez. Luego lo hizo otra vez, y otra, y otra.
La bola que Crow-Armstrong tenía en su guante fue el último out que selló lavictoria 3-1 sobre los Padres en el Juego 3 de la Serie de Comodines de la Liga Nacional el jueves en el Wrigley Field. Fue un duelo a todo o nada, y antes del juego, Crow-Armstrong se sentó ante los medios y dijo que los Cachorros “le deben más béisbol de postemporada” a los aficionados que convirtieron el antiguo estadio en una caldera durante tres días.
“Es real”, dijo Crow-Armstrong sobre la atmósfera. “Te estaría mintiendo si dijera que no estaba pensando en darme la vuelta y decirles algo a esas personas allá afuera. Les debemos todo a quienes vienen y están aquí cada día. Ellos son tan parte de esto como las personas en este clubhouse”.
Crow-Armstrong también sabe que muchos aficionados van al estadio para verlo jugar, y el estelar de 23 años asume esa responsabilidad con orgullo, incluso mientras se encuentra bajo la lupa y en el centro de los reflectores al mismo tiempo. Bueno, con la temporada en juego, el chico cumplió su promesa previa al partido, logrando una joya defensiva que desafió a Statcast, además de conectar tres imparables.
Y luego, en el clubhouse, Crow-Armstrong y sus compañeros desataron la fiesta.
Las láminas de plástico protegían los casilleros en la sala circular, diseñada perfectamente para que la celebración se concentrara en el centro. El champán volaba por los aires en celebración de la primera serie de postemporada que los Cachorros ganan en casa desde que obtuvieron el banderín en el 2016. Los del norte de Chicago no ganaban una serie de playoffs desde la Serie Divisional del 2017 contra los Nacionales — y fue su primera victoria en un juego de vida o muerte en el Wrigley Field.
Ahora, los Cachorros tienen una cita con los rivales Cerveceros, que ganaron la División Central de la Liga Nacional y obtuvieron el pase directo a la ronda de la Serie Divisional. Aproximadamente 90 millas separan Wrigley Field del American Family Field, pero esta será la primera vez que ambos equipos se enfrenten en una serie de postemporada.
TIGRES AVANZAN AL VENCER A CLEVELAND
CLEVELAND (AP) – Dillon Dingler despachó un jonrón en el sexto inning, Wenceel Pérez impulsó dos anotaciones dentro del racimo de cuatro en el séptimo y los Tigres de Detroit vencieron el jueves por 6-3 a los Guardianes de Cleveland para avanzar a la Serie Divisional de la Liga Americana.
Se trata de la segunda temporada consecutiva que los Tigres ganan una serie de Comodines como visitantes. Detroit viajará a Seattle para iniciar una de las Serie Divisionales a partir del sábado.
Los Mariners, campeones del Oeste de la Liga Americana y segundos clasificados, ganaron cuatro de los seis encuentros de la temporada regular contra los Tigers que obtuvieron el tercer Comodín.
El astro dominicano José Ramírez aportó un sencillo remolcador para Cleveland en el cuarto episodio, pero la suerte de los Guardians quedó sellada cuando Detroit armó su rally en el séptimo.
Los Guardians, campeones de la Central de la Liga Americana, estaban 15 juegos y medio detrás de Detroit a principios de julio antes de completar la mayor remontada en la historia de la división o liga en las Mayores.
Sin embargo, se quedaron sin fuerzas en la serie al mejor de tres, ya que Detroit pasó página después de registrar el segundo peor récord en las Mayores en septiembre (7-17).
El juego estaba empatado 1-1 con dos outs en la sexta entrada cuando Dingler prendió un cambio elevado de Joey Cantillo en cuenta de 1-1 y lo envió 401 pies a las gradas en el jardín izquierdo-central para poner a los Tigres al frente.
También fue el primer hit y carrera impulsada en postemporada para el receptor de los Tigres.
Detroit luego amplió la ventaja en la séptima al enviar a 10 bateadores al plato y anotar cuatro veces.
Con un out y las bases llenas, el dominicano Pérez conectó un sencillo al jardín derecho ante Erik Sabrowski para impulsar al puertorriqueño Javier Báez y Parker Meadows. Hunyter Gaddis entró y permitió hits impulsadores a Spencer Torkelson y Riley Greene, que trajeron al plato a Kerry Carpenter y Pérez.
Kyle Finnegan se llevó la victoria, retirando a los cuatro bateadores que enfrentó. Cantillo cargó con la derrota.
Los Tigres abrieron el marcador en la tercera entrada. Con un out y corredores en las esquinas, Carpenter dio un rodado por la línea de primera base que se desvió del guante de C.J. Kayfus cuando intentó atraparlo de revés. La pelota rodó hacia territorio de foul cerca de las gradas, permitiendo que Parker Meadows anotara, en tanto que Carpenter avanzó a segunda y el venezolano Gleyber Torres llegó tercera. El anotador oficial dictaminó el batazo como un doble.
Los Guardianes lo empataron en la cuarta. George Valera abrió con un doble a la esquina del jardín derecho y anotó con el hit de Ramírez al jardín derecho-central ante un curva de Flaherty en cuenta completa.
El sencillo fue el hit número 40 de la carrera de postemporada de Ramírez, convirtiéndolo en el quinto jugador en la historia de la franquicia en alcanzar ese hito.
En la octava entrada, Ramírez llegó a base por un error del relevista de Detroit Will Vest, con lo que el venezolano Brayan Rocchio y Steven Kwan. Pero Ramírez fue puesto out en segunda.