El «Mexicano» Khris Davis combina Fuerza, rápidez e inteligencia y habilidad.
Por Richard Justice
El cañonero de los Atléticos, Khris Davis, podría ser el jugador más interesante de todo el béisbol ahora mismo. Veamos por qué:
1. Su gran poder
Cada turno al bate de Davis es digno de admirar porque nadie se quiere perder uno de sus panorámicos batazos. En una época en la que los cuadrangulares están siendo conectados con más frecuencia que en ninguna otra era en la historia de la Gran Carpa, los batazos largos siguen siendo la gran atracción.
Ver a un toletero combinar fuerza, rapidez, inteligencia y habilidad para mandar lejos un pitcheo de 97 millas por hora siempre será un deleite para los amantes del llamado Rey de los Deportes. Davis hace esto con más frecuencia que cualquier otro bateador. El cañonero de raíces mexicanas, debido a que su madre nació en Culiacán, Sinaloa, lidera las Mayores con 10 batazos de vuelta entera esta temporada y lleva paso – si usted cree en esas cosas – de disparar 85 jonrones.
Sí, 85. Claro, los cálculos del paso que lleva un jugador de un punto al final de la campaña rara vez se mantienen, pero en este caso, es un reflejo de lo bueno que Davis es. Ningún bateador de Oakland ha superado la marca de los 50 cuadrangulares en un año desde que Mark McGwire registró 52 en 1996.
Nacido en California, pero criado en Arizona, Davis encabezó las Grandes Ligas con 48 el año pasado, y desde que los Atléticos lo adquirieron para la temporada del 2016, sus 143 bambinazos exceden por 19 a su más cercano perseguidor (Giancarlo Stanton).
Esos cañonazos llegan por racimos, y eso es lo que Davis precisamente sabe hacer. Se voló la cerca tres veces en los primeros cuatro juegos de Oakland, y luego sacudió cinco más en un trecho de tres partidos ante los Orioles y Rangers la semana pasada. Le está dando bien sólido a la bola de manera consistente — 14.3% de barriles (término de Statcast™ para una bola conectada con una combinación ideal de velocidad de salida y ángulo de despegue que típicamente produce extrabases) por visita al plato, empatado en la 11ma mejor posición en Grandes Ligas.
2. La agencia libre lo espera
Mientras otros potenciales agentes libres firman extensiones, Davis sigue sin hacerlo. Salvo el antesalista de los Nacionales Anthony Rendón, Davis podría ser la opción más atractiva de todo el mercado el próximo invierno.
Davis ha dicho en repetidas ocasiones que preferiría permanecer con los Atléticos, y ambas partes ya han sostenido conversaciones. Pero el excelente comienzo esta campaña probablemente aumente su precio de venta.
Davis tendrá 32 años de edad para el Día Inaugural la próxima temporada y entiende que los equipos se han mostrado cautelosos a la hora de otorgarles contratos multianuales a esta clase de jugadores. Este año devenga un salario de US$16.5 millones tras haber llegado a un acuerdo y con ello evitado el arbitraje salarial. Davis ha dicho que le gustaría recibir una extensión de por lo menos tres años.
“Eso es mucho tiempo para ser un Atlético de Oakland”, les dijo Davis a los reporteros durante la temporada muerta. “Pero si alguien puede hacerlo, creo que puedo ser yo, con suerte”.
Jim Thome fue el último jugador en disparar 50 vuelacercas en su campaña previa a la agencia libre – eso fue en el 2002 – y el cañonero zurdo firmó un contrato de seis años y US$85 millones con los Filis. Thome, al igual que Davis, tenía 32 años de edad en el Día Inaugural con su nuevo club.
“Él siempre me ha insinuado que desea permanecer aquí”, el piloto de Oakland, Bob Melvin, les dijo a reporteros en el invierno, “pero también debe tomar la decisión que más le convenga a él y a su familia”.
3. Personalidad
Davis es la clase de persona que se gana el agrado de los fanáticos, compañeros y dirigentes por igual. Su humildad es real y valorada por los seguidores de los Atléticos. Su falta de egoísmo es un reflejo de la cultura que Melvin ha intentado crear en este equipo, y la ética de trabajo de Davis genera un impacto bien importante en los jugadores jóvenes del club.
“Creo que el muchacho ha encajado de manera natural aquí como lo han hecho otros grandes jugadores en el pasado”, destacó Melvin. “Luce como el jugador ideal para nuestra ciudad y para nuestro equipo. La actitud que siempre muestra se trata de una superestrella, pero con la mentalidad de siempre mantener los pies sobre la Tierra. No le gustan los reflectores”.