GRAND SLAM DE GREGORIUS LLEVA AL TRIUNFO A YANQUIS

Mellizos se colocan contra la pared al caer 8-2

Por Eric Núñez/Associated Press

NUEVA YORK — Cuesta creerlo, pero los Yanquis de Nueva York se presentaron con la misma alineación en juegos consecutivos por primera vez en el año. También se ratificó a Didi Gregorius como titular y éste respondió en grande a la confianza depositada por el manager Aaron Boone.

Gregorius despachó un grand slam dentro de un racimo de siete carreras en el tercer inning, y los Yanquis aplastaron otra vez a los Mellizos de Minnesota, imponiéndose el sábado por 8-2 para tomar una ventaja de 2-0 en la Serie Divisional de la Liga Americana.

Nueva York necesita una victoria más para liquidar la serie al mejor de cinco juegos.

¿Qué harán al viajar a la casa de Minnesota?

“Vamos a apretar las tuercas”, afirmó Boone. “Tenemos toda clase de poder de fuego para el lunes”.

Los Mellizos desembarcaron en el Yankee Stadium como el equipo que trituró el récord de jonrones en una temporada regular, pero los Yanquis ni se inmutaron. Después de todo, los campeones de la División Este batearon 306, uno menos que el llamado “Escuadrón Bomba” de Minnesota.

El jonrón de Gregorius distanció a los Yanquis en un tercer inning en el que sus nueve bateadores acudieron al plato. El campocorto curazaleño se bamboleó con el madero tras conectar una recta de 94 mph del relevista Tyler Duffey cerca del poste de foul del jardín derecho.

“Sabía que era un batazo bueno”, dijo Gregorius.

Fue una manera enfática de sacudirse de un bajón ofensivo: bateó para .194 en septiembre y se fue de 3-0 en el primer juego. No disparaba un jonrón desde el 10 de septiembre.

En la antesala del segundo duelo, Boone dio por sentado que Gregorius iba a despertar con el bate. Y fue lo que hizo el ambidiestro, octavo en el orden ofensivo: dio un sencillo al cuadro en su primer turno y luego conectó su jonrón rumbo al segundo nivel de gradas.

“No me sorprende en lo absoluto. Es lo que espero de Didi”, dijo Boone. “Cuando uno cree que lo tienes vencido, te responden con un tremendo swing”.

Los Mellizos siguen sumidos en una espiral negativa en los playoffs: han perdido 15 juegos seguidos, incluyendo 12 al hilo ante los Yanquis. La racha ante Nueva York es la más larga en la historia de la postemporada frente a un rival en particular, eclipsando la hegemonía de Boston sobre los Angelinos de 1986 a 2008.

Para la última victoria de Minnesota en un juego de playoffs habría que irse al primer juego de la Serie Divisional de la Americana en 2004, cuando Johan Santana superó a los Yanquis.

Al borde del abismo en la serie, los Mellizos tratarán de frenar la mala racha al irse a casa para el tercer juego, que se disputará el lunes.

“Tenemos la seguridad de que podemos darle la vuelta”, dijo el manager de los Mellizos Rocco Baldelli.

Tendrán que contener a unos Yanquis que ganaron 103 juegos en la temporada regular. Cada uno de los nueve titulares los “Bombarderos del Bronx” se embasó, acumulando 11 hits y ocho boletos.

El abridor de los Yanquis Masahiro Tanaka cubrió cinco innings, permitiendo una carrera y tres hits, con siete ponches. La segunda carrera de los Mellizos no llegó sino hasta el noveno episodio, con un doble productor del venezolano Luis Arráez ante el nicaragüense Jonathan Loaisiga, quien luego se encargó de poner fin al duelo.

Luego de caer 10-4 el viernes, el manager de los Mellizos recurrió al novato Randy Dobnak, un pitcher que a inicios de año conducía para Uber para complementar sus ingresos y que hace una semana se casó. El derecho fue atacado de inmediato, permitiendo un sencillo remolcador a Edwin Encarnación en el primero.

Sobrevivió una amenaza en el segundo y fue relevado tras congestionar las bases sin outs en el tercero.

Duffey no pudo evitar el daño al tolerar un elevado de sacrificio de Giancarlo Stanton, seguido por un sencillo impulsor de Gleyber Torres y un pelotazo a Gary Sánchez. Todo eso antes del cañonazo de Gregorius, quien no pudo debutar en la campaña hasta inicios de junio tras someterse a una cirugía reconstructiva en el codo derecho.

“Todo el mundo pasa por altibajos, pero hay que mantener la confianza siempre alta”, comentó Gregorious. “La gente siempre dirá si haces algo bien o mal. Lo único que me toca hacer es salir a jugar y hacerlo mejor”.

Los fanáticos en el Bronx se deleitaron de principio a fin — se mofaron de Dobnak coreándole “¡Uber!” cuando calentaba en el bullpen.

El momento cumbre al anochecer llegó con el slam de Gregorius, el 12do en la historia de los Yanquis en los playoffs.

Los Yanquis buscarán barrer la serie con el dominicano Luis Severino en el montículo, en la que será su cuarta aparición en una temporada casi perdida por culpa de lesiones en el hombro y dorsal. Severino lució bien en tres aperturas en el último mes. Jake Odorizzi abrirá por Minnesota.

Por los Mellizos, los dominicanos Jorge Polanco de 3-0, Nelson Cruz de 3-1 con una anotada y una empujada, Miguel Sanó de 4-0. El puertorriqueño Eddie Rosario de 4-1. Los venezolanos Arráez de 4-2 con una empujada, Marwin González de 3-0.

Por los Yanquis, los dominicanos Edwin Encarnación de 4-2 con una anotada y una empujada, Gary Sánchez de 2-0 con una anotada. El venezolano Gleyber Torres de 5-1 con una anotada y una producida. El colombiano Gio Urshela de 4-2.