El mexicano Julio Urías carga con el descalabro ante Nacionales. San Luis vence a Atlanta
Por Howard Fendrich/Associated Press
WASHINGTON — Max Scherzer comenzó el mes con la fama de un lanzador cuyos equipos normalmente caían en postemporada. Pero resulta que durante este octubre, cada vez que el as ha lanzado, los Nacionales se han llevado el triunfo.
Scherzer laboró siete innings de un duelo al que llegó con la misión de salvar la temporada, Ryan Zimmerman aportó un jonrón de tres carreras y Washington doblegó el lunes 6-1 a los Dodgers de Los Ángeles para obligar a un quinto y decisivo juego en la Serie Divisional de la Liga Nacional.
Los Nacionales, quienes llegaron a la postemporada con un boleto de comodín, han empatado la serie ante el conjunto con la mejor marca en el Viejo Circuito.
“Agoté el combustible, me quedé con el tanque vacío”, dijo Scherzer acerca del esfuerzo que requirió para gestionar su última entrada.
Frunciendo el ceño y murmurando para sí mismo en su tercera aparición de esta postemporada, Scherzer permitió una carrera y cuatro hits, durante una faena que incluyó nueve ponches. Más importante para Washington fue que Scherzer y los Nacionales evitaron que Los Ángeles finiquitaran la Serie Divisional tras tomar ventaja de 2-1 en el cuarto juego.
“Realmente nos dio todo lo que tenía”, comentó Anthony Rendón, quien produjo tres carreras por Washington.
En los últimos episodios, mientras los fanáticos pedían a coro vencer a Los Ángeles, Sean Doolittle y Daniel Hudson se combinaron para sacar los seis outs finales.
El quinto partido será el miércoles en Los Ángeles. Stephen Strasburg está programado para abrir por los Nacionales contra Walker Buehler.
“Si pudiera apostar, lo haría por él”, afirmó el jardinero de los Nacionales, Adam Eaton, en referencia a Strasburg. “Es un pitcher muy bueno, pulido. Tenerlo saludable y listo en esta situación simplemente eleva nuestra confianza”.
El club que se lleve la victoria enfrentará en la Serie de Campeonato de la Nacional a los Bravos de Atlanta o los Cardenales de San Luis, quienes también están empatados 2-2 en la instancia divisional.
Zimmerman, de 35 años, mostró lo que aún puede hacer en el plato al conectar un lanzamiento a 97 mph, el segundo enviado por el relevista dominicano Pedro Báez, y convertirlo en una parábola que descendió detrás de la barda del jardín central para producir tres anotaciones y colocar la pizarra 5-1.
“Zim hizo un swing realmente bueno en ese lanzamiento”, reconoció el piloto de los Dodgers, Dave Roberts.
El batazo llegó luego que el relevista mexicano Julio Urías, el tercer lanzador de Los Ángeles y quien cargó con la derrota, comenzó el quinto episodio permitiendo una línea de hit de Trea Turner, quien finalizó con tres imparables. Rendón pegó un sencillo productor que puso la pizarra 2-1.
Rendón empujó otro par de carreras, con elevados de sacrificio en la tercera entrada y la sexta.
Y ese apoyo bastó para Scherzer, quien se marchó después de ejecutar 109 pitcheos, Su momento más estresante llegó con las bases congestionadas tras un par de boletos, cuando había un out del séptimo capítulo.
Scherzer salió de ese atolladero con un ponche al emergente Chris Taylor y obligando a que Joc Pederson pegara una roleta.
El pitcher agitó los brazos y gritó, mientras volvía a la cueva de los locales.
BRAVOS Y CARDENALES EN GRAN BATALLA, SE VAN AL QUINTO
Por Jay Cohen/Associated Press
SAN LUIS –-Todos lo sabían. Paul Goldshmidt y los Cardenales. Ozzie Albies y los Bravos.
Es muy difícil dominar a Yadier Molina en los momentos cruciales de un juego de postemporada.
El puertorriqueño condujo a San Luis al quinto y decisivo juego de la Serie Divisional de la Liga Nacional el lunes, al batear un sencillo productor para empatar la pizarra en el octavo inning y añadir en el décimo un elevado de sacrificio que significó la victoria por 5-4 sobre Atlanta.
“Me encantan estos momentos”, dijo Molina.
Y no lo dijo en broma.
Lanzó su bate hacia el jardín derecho luego de su elevado de sacrificio que resolvió el duelo, y la multitud que abarrotó el estadio Busch estalló en júbilo junto con el receptor, pelotero emblemático del plantel.
“Es un jugador de elite, muy especial, eso es lo que es”, destacó el manager de los Cardenales, Mike Shildt.
El quinto juego será el miércoles, de regreso en Atlanta. Los Cardenales mandarán al montículo a su as Jack Flaherty, y los Bravos irán con Mike Foltynewicz.
“Estaremos frente a nuestros fanáticos el miércoles, en el quinto juego”, dijo el primera base de los Bravos, Freddie Freeman. “Eso es lo importante, y estaremos listos”.
Kolten Wong abrió la 10ma entrada para San Luis con un doble de terreno contra el colombiano Julio Teherán (0-1). Luego de un boleto intencional a Goldschmidt, Wong avanzó a tercera con una bola ocupada del dominicano Marcell Ozuna y fácilmente llegó al plato gracias al profundo elevado de Molina al jardín izquierdo.
Wong elevó sus manos mientras corría hacia el plato. Molina llegó a primera base con su bate en la mano, y luego lo lanzó mientras estallaba la celebración.
El cátcher estelar fue rodeado por el resto de los Cardenales, que invadieron el terreno.
“Me volví loco ahí”, confesó el veterano de 37 años. “Creo que lance el bate hasta el bullpen”.
Molina empató la pizarra 4-4 mediante un sencillo con dos outs en el octavo capítulo. La pelota pasó apenas arriba del guante de Freeman, quien saltó tanto como pudo desde su posición en primera base.
“Pensé que iba a atraparla. Sólo hubiera necesitado medir 6-7”, dijo Molina, quien mide seis pies y cinco pulgadas (1,95 metros), y no la estatura que mencionó, equivalente a dos metros.
Ozuna conectó un par de cuadrangulares y produjo tres carreras por Atlanta, mientras que el venezolano Ronald Acuña Jr. sumó cuatro imparables. Pero los Bravos, campeones de la División Este de la Liga Nacional, se fueron de 9-0 con corredores en posición de anotar.
Se trata de un problema que los ha aquejado durante los playoffs en los últimos dos años.
Atlanta dejó la casa llena en el sexto y en el séptimo episodio. Acuña se quedó suspirando en la antesala en el noveno, cuando Josh Donaldson conectó un elevado.
“Nos quedamos a unos hits de avanzar. Simplemente nos hicieron algunos outs productivos”, explicó el piloto Brian Snitker.