AUNQUE NO RESPONDIÓ, VILLANUEVA GOZÓ

El tercera base mexicano se fue sin hit en onces turnos

MONTERREY, México — Aunque Christian Villanueva no logró su cometido de rendir al bate en el Estadio de Béisbol Monterrey frente a la fanaticada mexicana, sí gozó ser parte de unos Padres que se llevaron dos de tres compromisos ante sus rivales Dodgers en la Mexico Series este fin de semana en el Palacio Sultán.

«Yo quería montar un show. No pude hacerlo, pero no importa», dijo el tercera base mexicano del equipo de San Diego el domingo tras la victoria de los Frailes sobre Los Angeles por 3-0. «Se ganó, que es lo más importante y disfruté tanto como mi equipo. Estoy contento de haber jugado en frente de mi gente mexicana y se lo agradezco mucho».

Villanueva se fue de 12-0 con tres ponches, una base por bolas y una carrera anotada en los tres compromisos contra los Dodgers. Pero los Padres, después de ser dejados sin hit ni carrera el viernes por el pitcheo combinado de los azules, reaccionaron para vencer tanto el sábado como el domingo a los campeones defensores de la Liga Nacional.

«Estoy bien orgulloso de la forma en que respondieron los muchachos después de eso, tanto desde el punto de vista ofensivo como de pitcheo», dijo al respecto el primera base de los Padres, Eric Hosmer, quien dio jonrón el sábado y el domingo para ayudar a su equipo a triunfar en ambos juegos.

MUCHA PRESENCIA DODGER EN LAS GRADAS
Debido a la fuerte fanaticada de los Dodgers en todo México, lo cual incluye por supuesto la ciudad de Monterrey, los aficionados del equipo azul fueron más que los del club de San Diego. Pero los Padres se sintieron apoyados de cualquier forma.

«Nos sentimos valorados aquí, sobre todo teniendo a Christian Villanueva en nuestro club», expresó el manager de los Frailes, Andy Green. «Sentí que el recibimiento fue cálido para nosotros. Fue un gran lugar para jugar béisbol.

Villanueva notó lo mismo.

«Estaban apoyándonos y felicitándonos», dijo.

CONTENTOS CON LA EXPERIENCIA
Fue positivo para los Padres ganarles dos de tres juegos a los Dodgers, pero la experiencia en sí hizo que venir a Monterrey valiera la pena para los protagonistas de San Diego.

«Fue especial por el lugar donde jugamos, no contra quien jugamos», manifestó Green. «Fue especial porque fue aquí. Fue una oportunidad única para nosotros y para los fans. Por eso, significó mucho.

Los dos imparables de Hosmer en la serie fueron cuadrangulares de dos carreras. El recién firmado por San Diego estaba bien consciente de lo que significaba para México recibir esta serie, en parte por sus raíces cubanas como oriundo de Miami.

«Obviamente hacía mucho tiempo que no se jugaba béisbol de Grandes Ligas aquí», dijo el inicialista. «Creo que es algo que todos queríamos hacer. Sabíamos de la base de fanáticos de ambos equipos y queríamos montar un buen espectáculo. Estoy contento de que hayamos salido airosos».

Villanueva, apenas el tercer mexicano en accionar en series de temporada regular de Grandes Ligas en México (Fernando Valenzuela con los Padres, 1996 en Monterrey; Vinny Castilla con los Rockies, 1999 en Monterrey), se expresó contento de haber sido parte de esta fiesta beisbolera.

«Mirar alrededor del estadio y mirar cómo se enfocan tanto en el béisbol», comentó Villanueva con una sonrisa acerca de la fanaticada. «Estamos contentos de haber puesto un buen show para toda la gente mexicana».