OTRO JUEGAZO DE PITCHEO Y OTRO TRIUNFO VERDE

Hit de Olmo Rosario en la novena empuja la carrera con la que los Cañeros blanquean a los Venados 1-0.

Por Jesús Álvarez Palafox

Mazatlán, Sin. Se escribe de nuevo la historia en la novena. Una vez más el duelo de pitcheo se hizo presente durante ocho entradas y por segunda noche consecutiva los Cañeros atacaron en la novena para terminar ganando 1-0 a los Venados de Mazatlán.

Detalles interesantes en el encuentro, de nuevo la novena entrada, el nombre de Ramón Urías vuelve a sobresalir, D. J. Johnson llegó al relevo y como una noche anterior, se enfrentó al tercero, cuarto y quinto cerrando de nueva cuenta con ponche a Corey Brown, aunado a eso el imparable productor de Olmo Rosario quien fue el héroe indiscutible.

La historia se escribió cuando Oscar Verdugo y Luis Pérez se tranzaron en duelo de ceros durante ocho entradas. En la novena ya no salió Verdugo y vino Roberto Espinoza quien dominó a Sebastián Valle con elevado al derecho, surge la figura de Ramón Urías y conecta el cañonazo entre derecho y central que lo convierte en triple, la intencional para Juan Carlos Gamboa, aparece la figura de Olmo Rosario y con sencillo envía a Urías con la carrera de la diferencia, todavía vino un elevado al derecho de Michael Wing y Gamboa quiso anotar de pisa y huye pero fue puesto aut.

PITCHEO DE PRIMER NIVEL

Tanto Luis Manuel Pérez de Cañeros como Oscar Verdugo de los Venados, brindaron excelente espectáculo sobre la loma de los disparos.

El derecho de los Venados Oscar Verdugo, lanzó ocho entradas con pelota de cuatro hits, buen control al no regalar base por bolas y ponchó a cuatro y se fue sin decisión, Roberto Espinoza fue el derrotado lanzando la novena con par de hits y una carrera.

Luis Pérez alcanzó su primer triunfo de la campaña con los Cañeros con un trabajo de ocho entradas, solo dos hits. El primero se lo conectaron en la sexta y fue una planchita de Jesús Fabela, completó su labor con tres bases y tres ponches. D. J. Johnson lanzó la novena entrada llevándose su segundo salvamento.